Doña Laura desde hace unas semanas
tiene nuevos vecinos y vecinas
que están en huelga de hambre, por la mina
que en Crucitas ya clava su macana.
La mina va a dejar bastante “lana”,
“chochosca”, “harina”, en fin, mucha riqueza,
desde hace tiempo está servida ya esa mesa,
en la que ni usted ni yo seremos comensales,
pues la plata, el dinero, o sea “los reales”
se quedará en los bolsillos de “Infinito”,
Esto no es leyenda, cuento o mito,
es la pura verdad que nadie niega.
pero aquí es donde viene la gran pega:
no es tan solo que dejen poca plata,
y se lleven el oro cual piñata,
sino que dejarán la tierra seca,
ahí no pegará ni un palo’e teca,
y todo ese sistema agroecológico,
la flora, el agua y todo ese zoológico
se lo tragará un cráter con laguna
parecido a los hoyos de la Luna.
Sumen a esto el riesgo y la amenaza
del tóxico cianuro ¡será brasa
candente en las entrañas de Crucitas!
que el mal de otros países no repita
el Gobierno central de doña Laura,
la presidenta que llegó con aura
de ser una mujer firme y honesta,
en esta situación la tiene puesta
para mostrar si tiene uno, o… varios,
si sigue el guión escrito por corsarios
que usurparon el sueño de don Pepe,
(del que queda una estatua, ahí en Chepe),
o si responde al pueblo y su conciencia,
si rompe ya por fin la indiferencia
y responde de cara a estos huelguistas,
que vagabundos no son, ni terroristas,
son gente libre, patriotas, ciudadanos,
ciudadanas, ¡que son nuestros hermanos,
conciencia lúcida del ser costarricense,
que están haciendo que este pueblo piense!
En el recuento de daños que yo aporto,
en verdad que me he quedado corto:
ya lo dice este nombre que repito:
con esta mina el daño es INFINITO.
A ustedes, que están en huelga de hambre,
soportando fríos, ardores y calambres
les digo: Muchas gracias, compatriotas,
de su semilla, el árbol de la Patria brota.
A doña Laura Chinchilla, con respeto,
le pido que derogue ese decreto
y demuestre que más que el vil metal
usted busca el progreso nacional,
no el lucro explotador, depredatorio
del infinito ladrón trasnacional.
Doña Laura, en esta hora crucial,
ponga “cianuro” a la sombra de los Arias
¡Por una Costa Rica solidaria,
por Crucitas humana y ambiental,
que vivan quienes cantan, con su hambre,
nueva estrofa del Himno Nacional!
Carlos Bonilla Avendaño
céd. 4-121-878
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