El régimen quedó al desnudo

• Al revelarse el contenido de la nota oficial dirigida a los hermanos Arias,suscrita por el vicepresidente y un diputado oficialista, el régimen se ha puesto a si mismo al desnudo.

Por José Luis Callaci

¿Qué más se necesita para que muchos entiendan en manos de quienes estamos? Las conductas pusilánimes mejor que den un paso atrás, la Patria hoy reclama a los valientes.

Con disimulos y negaciones, inducidas muchas veces por infiltrados del régimen, se ha perdido mucho tiempo ocultando, ante nuestro pueblo y la comunidad internacional, nuestras crudas realidades so pretexto de "no manchar la imagen de Costa Rica".

Una imagen que viene siendo, una y otra vez sí y esta también, pisoteada por una "mafiocracia" que usurpa el poder. Dar a conocer la resistencia a estos abusos y atropellos sirve más bien para salvar en algo lo que aún queda de la misma.

No existe diferencia alguna entre la conducta de los que suscribieron la nota, que hoy es noticia, y la de otros representantes de los demás poderes, obligados hoy a una vergonzosa connivencia con el ejecutivo.

El miedo también reina en las entrañas del régimen. El descargo que con total desparpajo ha hecho el principal destinatario de la nota, al decirle a la prensa nacional que sus contenidos fueron solo "sugerencias" es mofarse de los costarricenses.

Todo lo "sugerido" allí, se ha cumplido rigurosamente porque esa ha sido la orden y la voluntad del jefe. Sus súbditos simplemente cumplieron con la tarea encomendada.

A los que hay que llamar a cuentas no son a estos, sino a los entronizados que pidieron estos consejos y que aunque ahora intenten negarlo, ordenaron su ejecución.

Que respondan los trabajadores si nos se les ha estado repitiendo hasta la saciedad que si no pasa este TLC las empresas se trasladarán a otro país. Que digan si tienen miedo de hablar para que no los despidan.

Que respondan los alcaldes si no se les ha amenazado para que públicamente se pronuncien a favor de este TLC o no habrá recursos para sus comunidades.

Que respondan los ciudadanos y ciudadanas, intelectuales, estudiantes, empresarios, trabajadores, religiosos y esas valientes mujeres de blanco, personas todas de diferentes pensamientos políticos o credos religiosos, que se han puesto al frente de la lucha patriótica contra este TLC, si no se les persigue acusándoles de ser agentes de gobiernos extranjeros.

Respondamos los que a diario escuchamos radio y vemos televisión, si la superficial y hasta vulgar propaganda del sí no nos tiene saturados. Respondamos los que vemos cómo con dineros públicos, con los dineros de todos los costarricenses, se hace campaña a favor de los espurios intereses de los ricachones de este país.

Siguen mintiendo y tratando de engañar a los más humildes e incautos. Son apátridas sin moral y sin bandera, cuyo único interés es el dinero. No entienden que este pueblo, constructor de una sociedad emblemática para el mundo, esta dispuesto a hacer cualquier sacrificio para impedir que el afán de enriquecimiento, rápido y obsceno, de unos pocos destruya esa gran obra.

Descubrir, como se ha hecho en esta oportunidad, los planes macabros de los conspiradores, es un recurso validado en la historia de los pueblos.

Hay un solo vuelo raudo, impetuoso que hoy eleva sus alas en el cielo de la Patria , el del pueblo costarricense. Nadie que ostente un poder temporal cuestionado, poseedor de extremas enfermizas vanidades y grandes limitaciones puestas en evidencia, jamás podrá suplantar o detener.

La conciencia de los hombres y mujeres de esta tierra avasallada por la codicia de unos pocos está activa y de pie. Está del mismo lado, en el mismo lugar.

El lugar de Juanito Mora, de Ricardo Jiménez, el de Pancha Carrasco y Rogelio Fernández Güell, el de Monseñor Sanabria y Manuel Mora, el de Rafael Angel Calderón Guardia y José Figueres Ferrer y el de tantos otros hombres y mujeres que dieron su vida por la Patria.

¡No a la mentira y al engaño! ¡No a este TLC! ¡Viva Costa Rica!

Fuente Informa-tico.com