Estamos en pie de lucha por la dignidad de la gestión pública, por el derecho y el deber de trabajar por el bien colectivo, por la opción de contribuir con el desarrollo sostenible de un país que, hasta hoy, ha sabido enfrentar las imposiciones internacionales con inteligencia y ponderación.
Estamos en pie de lucha para que las tendencias neoliberales y privatizadoras no nos impidan trabajar en redes por el bienestar de las mayorías que siempre ha estado y estará unido a la educación, la democracia, a la libertad –en nuestro caso la autonomía universitaria- la paz, la justicia social, la defensa de la institucionalidad, de los derechos humanos y ambientales.
Estamos en pie de lucha porque no queremos permitir que usando estrategias poco claras nos traten de dividir internamente, ni entre universidades, ni entre profesores y estudiantes, ni entre académicos y administrativos. Estamos en pie de lucha como UNA sola institución en su DIVERSIDAD y en sus posibilidades complementarias. No vamos a permitir que traten de dividir para vencer…
Estamos en pie de lucha porque NO queremos que nos privaticen, que obliguen al talento sin condiciones económicas a quedarse sin estudio. Queremos ser universidades públicas que colaboren con todos los sectores inclusive el sector privado, empresarial o de organizaciones de la sociedad civil. Queremos ser parte del sector público y redistribuir el conocimiento, abrir la oportunidad y permitir la movilidad social. Estamos en pie de lucha para que nos dejen trabajar en equipos interdisciplinarios, interuniversitarios, internacionales, intersectoriales en pro de un desarrollo colectivo que nos de seguridad en las calles, que proteja el medio ambiente, que pondere la innovación tecnológica y la educación, que impida abrir una nueva brecha entre los habitantes del país.
Estamos en pie de lucha porque no queremos el irrespeto de quienes nos gobiernan y, en lugar de responder con argumentos y por escrito a nuestras peticiones razonadas -como lo manda la constitución y la negociación entre personas educadas- se van a una guerra en los medios de comunicación, agresiva, descalificante y llena de falacias.
Estamos en pie de lucha porque no podemos tolerar la manipulación de la información, la falsedad y la intolerancia. ¿Si no defendemos las causas justas, si no defendemos la verdad, la oportunidad real de estudio para la gente con talento que no puede pagar, las becas, las residencias y los comedores estudiantiles, quién va a hacerlo?
Hemos entregado a los Ministros toda la información, rendimos cuentas, nos reconoce el sector privado con quien trabajamos, las comunidades, las instituciones mismas del gobierno, la inteligencia internacional situándonos en los niveles más altos de competencia.
Hemos mostrado nuestro quehacer una y otra vez y lo hemos demostrado con acciones. Ofrecemos aumentar la matrícula a 100.000 estudiantes, mejorar las becas y las condiciones de estudio, pero no queremos que nos conviertan en enseñaderos, en Universidades de tiza y pizarra, de computadora y técnicas repetitivas, queremos profesionales que sepan investigar y trabajan en y con la comunidad.
Por eso defendemos lo que debe ser una UNIVERSIDAD con tres actividades sustantivas: la docencia, la investigación y la acción social y una vida estudiantil integral e integradora.
NO es cierto que nuestros salarios sean mayores, ni que queramos dinero para subir los salarios. El crecimiento por anualidades lo tiene toda la administración pública y los otros aumentos son por méritos (publicaciones, innovación, idiomas, estudios), por esfuerzo personal y de equipo, POR TRABAJO y no vegetativo como dicen. La mayor parte de nosotros –sobre todo de los que trabajamos sin descanso, horas y más horas, con placer e imaginación, lo hacemos por VOCACIÓN y no por la paga. ¿Cuántos hemos rechazado mejores salarios?
Queremos el FEES para trabajar con y para el país.
Hoy venimos a entregar a nuestra Presidenta Laura Chinchilla toda la información que ya le entregamos a los Ministros. Venimos a pedirle que asuma su deber histórico como ciudadana, como universitaria y como mujer. A pedirle que se de la oportunidad histórica de defender la educación pública como la base de los derechos de solidaridad, como la base de la democracia y de la libertad.
Venimos a pedirle que, como Presidenta de la República de Costa Rica, que se de la oportunidad de ejercer un liderazgo que le permita pasar a la historia.
Venimos a ofrecerle al pueblo de Costa Rica seguir poniendo a su servicio nuestra imaginación, nuestra capacidad crítica, nuestra ética y nuestra capacidad para trabajar en y con el país.
Estamos convencidos de que invertir en educación es invertir RESPONSABLEMENTE en democracia y en desarrollo para el bien de todas y todos los habitantes de nuestra querida nación.
(*) Rectora Universidad de Costa Rica y Presidenta de CONARE
Fuente: Diario Digital El País
0 comentarios:
Publicar un comentario