Nicas ilegales trabajan en contrucciones de Guanacaste

• De 1.500 nicaragüenses que trabajan en hotel donde se produjo brote, solo 100 tenían permiso de trabajo.

Marietta Espinoza M.
mespinoza@diarioextra.com

La mayoría de los nicaragüenses que trabajan en las construcciones que se desarrollan en Guanacaste viaja a diario desde su país en autobuses que se encargan de dejarlos en suelo tico, específicamente en Guanacaste.

Así lo denunciaron las autoridades del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social, quienes afirman que existe toda una red que trasiega mano de obra nicaragüense.

De los 1.500 nicaragüenses que laboran en la construcción del Hotel Rui, solo 100 cuentan con un permiso de trabajo en el país.

Eugenio Solano, viceministro de Trabajo, recalcó que esta situación es grave, no solo porque entran de manera ilegal sino también porque los desarrolladores de estos megaproyectos subcontratan mano de obra extranjera sin respetar las normas mínimas de salud ocupacional y laboral.

“Ahí hay buses directos que salen de los centros de trabajo y los llevan a la frontera todos los días. Hay un trasiego enorme de trabajadores nicaragüenses que pasan todos los días a vista y paciencia de toda la gente”, afirmó Rodrigo Acuña, director general de Inspección de Trabajo.

¿Y los controles policiales? La autoridades prefrieron no referirse al tema por no ser de su competencia, pero reconocieron que es evidente que éstos no se respetan y que los nicas entran y salen de Costa Rica sin ningún problema.


Violaciones laborales

En la primera inspección realizada por el Ministerio de Trabajo en el Hotel Rui, perteneciente a la sociedad SF Costa Rica Hotelera Guanacaste, se detectó que estos patronos no pagaban horas extra, no tenían su personal asegurado en la Caja Costarricense de Seguro Social y mucho menos contaban con el seguro de riesgos de trabajo del Instituto Nacional de Seguros.

Además ofrecen deficientes condiciones higiénicas y de seguridad.

Dos meses más tarde, durante una segunda visita, el personal del Ministerio de Trabajo confirmó que la higiene y la seguridad habían empeorado, que el personal vivía en hacinamiento. La escasez de personal para hacer inspecciones es otro de los problemas que enfrenta el Ministerio de Trabajo, además cuando se visitan las construcciones los patronos se encargan de esconder a los ilegales y de dar chalecos y cascos a quienes siguen con su jornada.

Sin embargo las condiciones de incumplimiento laboral regresan tan pronto el personal del Ministerio de Trabajo abandona la obra.


Fuente Diario Extra

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